Amber Gallaway es la Intérprete de Lengua de Signos más rápida del mundo, título que se ha ganado por interpretar el vertiginoso ritmo del rapero más rápido del mundo, Twista.
Amber Gallawey es la definición humana de la palabra <<Flow>>.
Antes de hacerse viral, esta Intérprete de Lengua de Signos ya era conocida por su canal de YouTube, donde comparte sus creaciones artísticas: una mezcla de lengua de signos, expresión corporal y un toque personal que la hace única.
También es una gran activista de los derechos de las personas sordas. Aunque ella no es sorda, tiene una importante pérdida auditiva progresiva que le llevará a perder por completo la audición en un futuro, motivo más que suficiente para promover en ella esa sensibilidad a la hora de compartir con el mundo que otras formas de amar la música son posibles.
“La música es para toda la humanidad y no debe haber discriminación”
Cada concierto que interpreta le exige más de dos meses de preparación y cuando se sube al escenario no solo se preocupa por realizar a la perfección su actuación, sino que también baja del escenario y se comunica con las personas sordas de la primera fila para compartir con ellas los códigos que se usarán durante el show. ¡Esta es la verdadera inclusión! Porque de nada sirve una ILSE (Intérprete de Lengua de Signos) en un concierto si no es accesible desde el gran escenario al pequeño porcentaje de personas sordas que puedan asistir al evento, ¿verdad?
Dice Amber que: “cada instrumento tiene una voz. Son esas voces, en armonía con las palabras lo que nos transporta emocionalmente, tocando el alma. Dejar a un lado este aspecto sería una injusticia para la comunidad sorda”.
Ha acompañado en el escenario a artistas como Madonna, Snoop Dogg o Eminem. Sin duda, lo mejor que había en el escenario en esos conciertos era Amber Gallawey y ojalá su mensaje lleno de pasión por la música y amor por la humanidad se contagie en el trabajo de los y las artistas que interpreta.
Lo que nos tiene profundamente enamoradas de Amber Galloway es la manera en la que su cuerpo destila empoderamiento por cada poro. Un cuerpo periférico empoderado y seguro de sí mismo, admirado por miles y miles de personas.
Todo un ejemplo a admirar. ¡Gracias, Amber!
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