La Audiencia de Granada suspende ¡por fin! la pena de prisión impuesta a Juana Rivas, por lo que consigue la libertad seis años después que se iniciara el proceso. Con esta decisión de la Audiencia Provincial, corrige la condena anterior a Rivas que, pese al indulto otorgado por el Gobierno, no suspendía la pena de privación de libertad.
Con la suspensión de esta condena, Juana Rivas podrá viajar para ver a sus hijos a Italia, donde residen con su padre, pues un tribunal italiano le concedió la custodia en exclusiva, aunque con un régimen de visitas para la madre.
Recordemos que Juana Rivas fue ajusticiada por sustracción de menores al desaparecer en 2017 durante un mes con sus dos hijos, que no fueron entregados al padre. Pretendía con ello proteger a los menores de su expareja, Francesco Arcuri, quien fue condenado (2009) por agredirla y lesionarla. También lo denunció por maltrato en el año 2016.
Rivas ha recibido la noticia “emocionada y contenta” sin olvidar el duro camino que ha recorrido, pero su espíritu de lucha sigue intacto:
“Esto es un paso para todos: Porque los niños serán los hombres del futuro y esto es una lucha de amor hacia hombres y mujeres. No hay nada en contra de nadie”.
Esta es una buena noticia para Juana Rivas, para las madres españolas, para las víctimas y para la justicia feminista.
La de Juana es una condena dictada por la justicia patriarcal española que nunca debió imponerse, y que en su lugar debió proteger a las víctimas de violencia machista.
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