Anna Freixas acaba de publicar el libro “Yo, vieja”. Así, sin artificios ni eufemismos, hace un balance sobre cómo la mujer que vive la vejez se ha visto influenciada por la sociedad patriarcal durante toda su vida: “Nos hacemos viejas y entramos en un tiempo de recuperación de la voz perdida en el sueño de la feminidad que nos ha dejado sonrientes y amables, pero mudas.”
Pero a su vez, su libro es un alegato a la esperanza y a la fiel convicción de que las nuevas generaciones de mujeres ancianas, llegan a este momento de su vida más deconstruidas, que piden libertad, dignidad, justicia social y defensoras de su autonomía e independencia.
Habla sobre salud femenina, la viudedad, la depresión, sexualidad, autoaceptación, discriminación o autocuidados, entre otros muchos temas interesantes.
Un libro a tener muy en cuenta.
Comentarios